![](https://euclides59.files.wordpress.com/2012/07/noctiluca3.jpg)
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Permaneció sentado
con la mirada puesta en el vacío de la silla que ella había dejado. Las palabras
de ella en su mente se hicieron letanía. Solo reaccionó cuando el camarero le
preguntó que si quería la cuenta.
Salió del bar al
paseo marítimo y caminó un rato. Se sentó en el bordillo frente al mar y miró a
la estatua de la diosa Noctiluca, sin querer se le escapó un porqué…
Un torbellino de aire
como el terral lo envolvió en un abrazo cálido. La arena acompañó a la brisa y giró
a su alrededor forjando un muro infranqueable. Una nebulosa de brillos plateados
surgió del mar y la diosa hecha mujer bajó de su pedestal. Se aproximó y lo
besó en la boca. Sus cuerpos desnudos se acariciaron. Abrazos de suspiros acompasados
conectaron lo mágico con lo humano y el sortilegio acabó en hecho.
Despertó con el
amanecer, abrazado a los pies de la estatua.
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